Cánovas del Castillo y el relieve del Dios Hypnos de Jumilla

 

El presidente del Museo Arte y Vino y director del Centro de Recuperación de Escultura de Jumilla, Mariano Spiteri, ha presentado recientemente un relieve en el que aparece Antonio Cánovas del Castillo con la escultura del Dios Hypnos de Jumilla, tras una profunda recuperación que ha mostrado a la luz gran parte de la información perdida.

Se trata de un relieve de Mariano Benlliure firmado y fechado en 1896, y adquirido en un comercio de antigüedades de Madrid.

Cánovas del Castillo fue el político más importante de España en el último tercio del siglo XIX.  Contrajo matrimonio con María de la Concepción Espinosa de los Monteros, hija del Barón del Solar, Jacobo María Espinosa de los Monteros de Jumilla.

En 1889 Federico Madrazo pinta un retrato a Antonio Cánovas del Castillo. Al fondo, se observa la escultura de Palas Atenea donde se observa un solo libro y las manos de Cánovas inacabadas. Esta obra actualmente, se encuentra en el Museo del Prado.

Antonio Cánovas del Castillo fue nombrado hijo adoptivo de Jumilla el 28 de noviembre de 1892 tras su intervención en evitar la venta de los montes comunales de Jumilla.

 Al año siguiente, durante la construcción de una bodega, se halla la escultura del Dios Hipnos en Jumilla. La estatua encontrada fue llevada a casa del Barón del Solar y este la regaló a su cuñado, Antonio Cánovas del Castillo.

En 1896, Ricardo de Madrazo pinta el mismo cuadro que hiciera a Cánovas siete años antes. Al igual que su padre, Ricardo presenta a Cánovas acompañado también con Palas Atenea.

No es sorprendente el malestar de su cuñado, quien tan solo tres años antes había regalado a Cánovas una valiosa escultura del dios Hypnos de Jumilla. Según Mariano Spiteri, director del Museo Arte y Vino, la respuesta diplomática de Cánovas ante esta incómoda situación podría haber sido encargar al más renombrado escultor de la época, Mariano Benlliure, un retrato de él mismo junto a la famosa escultura del Dios Hypnos, procedente de Jumilla. Esta acción habría servido para zanjar el malestar entre ambos.